Mas Vida 17 – Chardonnay 100% – 2011

Nueva entrada en el blog. Como ven no es mía, no. Es de Míriam Clotet, amiga, compañera en una nueva andadura y bebedora compulsiva de vinos como yo. También tiene un montón de virtudes de esas de llenar curriculum pero de los güenos, no de esos de paripé que tanto se ve últimamente. Ah! y escribe como una bendita, bastante mejor que yo, cosa que no es ninguna virtud porque soy muy malo, pero escribe que es una delicia. Eso si, esto lo aprovecho yo para que explique un vino que como os diría, me peto la cabeza. Nada, ahí lo lleváis. Leed y disfrutad.

 

 

Mas Vida 17 – Chardonnay 100% – 2011

 

Los que me conocéis, sabéis que no suelo hacer notas de cata. Mis fotos siempre van acompañadas de historias surrealistas, vinícolas, independientes y llenas de intenciones, la mayoría ocultas. Pero este caso era diferente, primero un vino compartido con un proyecto que está naciendo (o re-naciento), segundo un vino compartido con Oscar, Júlia i Albert, personas que colaboran y encabezan el proyecto, y tercero porque soy totalmente consciente que describiré un vino en vía de extinción y por lo tanto, no me puedo resistir a la magia de estos momentos.

Así que por todos estos motivos, va por ti http://www.foodundercover.us/.

 

Me planto con mi 100% Chardonnay de Mas Vida (Cistella – Empordà) de más ni menos que el 2011.

 

Abrimos la botella, lleva 7 años escondido de la luz, por lo tanto nos pide a gritos que le demos tiempo, es lo mínimo que se merece. Pero puedo intuir lo que hay dentro y estoy demasiado impaciente, así que necesito probarlo de inmediato. Me guardo el primer pensamiento para mí, mi pequeño lujo.

Pasa el tiempo, flores secas, pasa un poco más de tiempo, melocotón muy maduro, continua pasando el tiempo, frutos secos…y al llegar el tiempo infinito: caramelo, azúcar quemado, postres de manzanas al horno, almendras tostadas y lo miro y le pregunto ¿qué has venido a romper todos mis esquemas?

 

En la boca largo, largo, largo y profundo. Como una especie de pequeño hilo que entra y nunca acaba. Es fino y con una personalidad única. Puede enamorarte o desenamorarte, tú lo eliges en el mismo momento que decides probarlo. Densidad y corpulencia que dejan en la boca un recuerdo intenso. Vuelvo a probar, hay una ligera crema de vainilla, también algo de especies dulces, pero esta todo tan integrado, que se convierte en un pequeño baile, un pequeño vals sincronizado. Salinidad que me recuerda a las tardes compartidas en las playas con mi hermana. Sol de un mediterráneo limpio y puro.

 

Finalizando la noche, hacemos broma y decimos: ¿pero esto es un fino? Y la verdad es que queremos decir que él mismo podría desarrollar la personalidad que él mismo quisiera.

 

Y canto por dentro  “A dintre meu. Què fort que bufa el vent aquesta nit suau. Quines coses més estranyes que passen prop de mi” (Maria Arnal i Marcel Bagés)

 

Al principio he dicho que está en vía de extinción, porque este vino cierra un círculo. Este mismo año, el 2018, Mas Vida ha abierto un nuevo circulo, en el que llevaba trabajando muchísimo, con nueva imagen, nueva concepción y nueva Vida (Más). Éxitos en un proyecto que destila personalidad propia en todo lo que hace, pero con este pequeño relato intento no perder este trocito de pequeña historia, que es deliciosa, y que además ha hecho a Adriana llegar hasta donde está hoy.

 

 

 

20180407003704_IMG_7299.JPG

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s